Perfil de no querencias

Imagen(*): Ben_Kerckx El amor es la pasión por la dicha del otro Cyranode Bergerac No quiero herir tu piel. ¡Me importas tanto! Si alguna vez mi voz se torna espina o mi mano reniega de dulzura habrá que detener los desvaríos, remover los despojos de los que se alimentan y conciliar de nuevo los diarios —hay muchos cabos sueltos en la vida y los humanos somos distraídos. No quiero lamentarte, no hay tiempo sin tu cuerpo ni cotidiana luz ni estrella de los vientos. Si algún día te afliges con ese dolor fino, puntiagudo, de los que cavan hondo, no dejes que se cubra de lama tu reclamo, vale gastar la tarde removiendo los lodos y que luego, en la noche, no se enturbie la sangre. No quiero ser tu herida. Me importas mucho. Conviene que lo sepas. (*) https://pixabay.com/es/service/license-summary/