Cuando dejaron de volar los elefantes

Imagen(*): LK_Drak Nunca, tampoco, t anto dolor se amotinó de golpe, ni tan herida estuvo la esperanza. Piedad Bonnett I la nieve se hizo agua y el agua disolvió la volátil textura de su aroma en el aire bajo un sol de inclemencia bochornoso dejamos al albur de la cólera hambrienta de reproches aquella sombra frágil de fortuna que alguna vez con el arrojo puesto reconcilió el temor con el coraje II Sobre ti, derramada, Oigo mi desnudez Silenciosa y exhausta. III abrumada de noche se me quiebran los rostros en un troquel de sombras lugar en que convergen los dueños del arbitrio no logro deshacerme del destino enredado entre los espejismos de un desierto perverso sin oasis donde se precipitan las agruras tremolinas espesas e importunas como calima lenta de verano que adormeciera frutos en las ramas IV Sola, entre retamas negras, Oscuras como pozos, ...