Desidia
Imagen(*): LeandroDeCarvalho
Sólo temo a los ojos
que no sepan brillar en la agonía,
que cieguen sus senderos
cuando quieran calmarse la mirada.
María Sanz
En algunos estómagos crece la impunidad,
como si de un tumor benigno se tratara,
cuando el pudor ante la atrocidad se esfuma
con el estruendo de la cobardía.
Sobreviene, entonces, la piedad impasible
frente al horror lúcido de la muerte,
la indolente plegaria de los tibios,
el lastimero beso de los judas.
¡Cuánto miedo yacente enmohecido
en las entretelas de la infamia!
(*) https://pixabay.com/es/service/license-summary/

Comentarios
Publicar un comentario